Cada 8 de marzo, el mundo se detiene para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, un momento crucial para reflexionar sobre la igualdad de género y el papel que todos desempeñamos en su promoción. En este contexto, es fundamental reconocer cómo las empresas pueden ser agentes de cambio, no solo en sus políticas internas, sino también en la forma en que sus empleados interactúan y se comportan en el día a día.
España, en los últimos años, ha conseguido situarse en una posición comparable a la de los países europeos en cuanto a la participación de la mujer en el mercado de trabajo.
Desde Inna Global, tenemos muy en cuenta esta participación de la mujer en el mercado laboral. De hecho, nuestra empresa está formada por dos socias fundadoras cuya apuesta principal radica en un pensamiento igualitario. No se pueden seguir acentuando las brechas de género que ya existían en la sociedad, y por ello, la igualdad de género debe situarse como prioridad y eje estratégico para impulsar el crecimiento social y económico del mercado laboral. En este intento de lograr esta máxima participación de la mujer en el mercado laboral, en Inna Global partimos de la premisa de que un 50% mínimo de nuestro personal debe ser mujer.
Las mujeres en Inna Global SL no solo aportan su pasión, sino también una serie de habilidades clave como la creatividad, la innovación, la organización y la planificación. Estas cualidades son esenciales para marcar la diferencia en cada proyecto que emprendemos.
Tenemos el compromiso de que al menos el 50% de las contrataciones que se realicen para llevar a cabo los diferentes proyectos sean realizadas a mujeres, siendo el enlace también entre la empresa y los clientes.
Desde Inna Global, entendemos que los monitores/as y personal al frente de las actividades son un modelo de referencia para las chicas y chicos que participan de las mismas. Nuestras monitoras y monitores son mucho más que educadores; son ejemplos a seguir. A través de sus actitudes y conductas, influyen positivamente en los asistentes, promoviendo un ambiente de respeto y aceptación. Lo que hacen y cómo se dirigen a los demás se convierte en una poderosa transmisión de valores, favoreciendo la igualdad y la no discriminación.
La igualdad en la empresa no se trata solo de políticas, sino de crear una cultura donde cada individuo, sin importar su género, se sienta valorado y respetado. En Inna Global, estamos comprometidos a fomentar un entorno donde la diversidad se acepte con normalidad y donde cada persona pueda expresarse libremente, sin miedo a ser juzgada.
Este 8M, celebremos los avances logrados, pero también reconozcamos el camino que aún nos queda por recorrer. La igualdad es un esfuerzo colectivo, y cada uno de nosotros tiene un papel que desempeñar. Desde nuestras monitoras y monitores hasta cada empleado en la empresa, todos podemos contribuir a un futuro más igualitario. ¡Juntos, hagamos de la igualdad una realidad!
